El gobierno del estado de Nuevo León se declaró en alerta ayer ante el inminente golpe del meteoro Beryl, que se espera impacte entre el domingo y el lunes de la siguiente semana. Este huracán llega justo después del reciente embate de Alberto, lo que significa que Nuevo León volverá a enfrentar condiciones meteorológicas adversas.
Según las autoridades, Beryl podría llegar como tormenta o depresión tropical la tarde del domingo, según los modelos de predicción del Centro Nacional de Huracanes y el Servicio Meteorológico Nacional. Aunque esta es la trayectoria más probable, Conagua considera que es necesario observar el impacto del fenómeno en la Península de Yucatán para confirmar su comportamiento y determinar su ruta final hacia el noreste de México.
Las lluvias provocadas por Beryl podrían llenar por completo las cuatro presas en Nuevo León. Además, debido a su trayectoria pronosticada hacia Reynosa, las precipitaciones podrían también recargar la presa Marte R. Gómez en Tamaulipas, superando los 700 millones de metros cúbicos necesarios para frenar el trasvase desde la presa El Cuchillo, en Nuevo León, según informó el gobernador Samuel García.
“La ruta es muy clara, Beryl está actualmente en Jamaica, llega el jueves en la noche, viernes en la madrugada a la Península de Yucatán, y aquí hace un quiebre hacia Brownsville, digamos que va directo a Reynosa y va a impactar sin duda a Monterrey”, puntualizó García en un video en sus redes sociales oficiales.
Ante este pronóstico, se instauró un Comité de Vigilancia encabezado por Protección Civil de Nuevo León en coordinación con el Organismo de Cuenca Río Bravo de Conagua y otras autoridades. Este comité está preparado para activar planes emergentes en caso de que Beryl comprometa la seguridad de la población.
El gobernador subrayó que Beryl podría entrar como tormenta tropical, trayendo beneficios en forma de lluvia. Sin embargo, no descartó que, si se potencia como huracán cerca de Nuevo León, servicios como el suministro de energía eléctrica y agua potable podrían verse afectados.
Llama estado a municipios a estar atentos
El gobierno del estado se reunió con alcaldes del área metropolitana de Monterrey para alertarlos sobre la llegada de Beryl y el posible desfogue de las presas. Hernán Villarreal, secretario de Movilidad y Planeación Urbana, indicó que se esperan grandes avenidas de agua debido al alto nivel de almacenaje de los embalses.
“Tomar las mismas medidas que ya se tomaron con respecto a Alberto; los pluviales, los cauces de los ríos y ahora las presas, porque como ya están en niveles muy altos de almacenaje, va a haber desfogue en las presas, entonces hay lugares que tienen más de 10 años donde no ha pasado agua», explicó Villarreal.
El funcionario añadió que se analizará detalladamente la infraestructura de la zona norte del estado, donde se espera que el huracán golpee con mayor intensidad, según Agua y Drenaje. A pesar de que la infraestructura cumple con los estándares de calidad en cuestión de pluviales, se revisará “con lupa” debido a inundaciones y otros daños registrados en fenómenos anteriores.
Respecto a las reparaciones de infraestructuras afectadas por Alberto, señaló que los trabajos en los carriles exprés de Constitución están en proceso y se espera que estén listos en dos meses, aunque podrían detenerse temporalmente con el paso de Beryl.
El gobierno del estado convocará a otra reunión informativa este fin de semana, donde se tendrá con mayor exactitud los alcances de Beryl en Nuevo León.
Con información de El Horizonte