El presidente Andrés Manuel López Obrador ha defendido enérgicamente su reforma de pensiones, destacando su intención de beneficiar a los trabajadores y no privarlos de sus recursos.
En este contexto, ha anunciado la creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar, con el propósito de reparar el daño ocasionado por las reformas implementadas por los expresidentes Ernesto Zedillo y Felipe Calderón.
López Obrador explicó que estas reformas redujeron significativamente los montos de retiro de los trabajadores, llegando a establecer pensiones de entre 3 y 5 mil pesos, lo que considera una gran injusticia. Se refirió específicamente a la reforma de Zedillo en 1997, que modificó la Ley de Pensiones y la Constitución para disminuir los montos de las pensiones a recibir por los trabajadores al jubilarse.
Además, señaló el daño provocado por la reforma al sistema de pensiones del expresidente Calderón en perjuicio de los trabajadores del Estado. Estas medidas, argumenta López Obrador, fueron posibles gracias a reformas constitucionales que afectaron a los trabajadores, y considera importante hablar de ellas para tomar medidas correctivas.
El mandatario también criticó el manejo de las Afores en relación con los recursos no reclamados por los trabajadores, que por ley deberían ser entregados al Seguro Social. Acusó a las Afores de no entregar estos recursos o hacerlo de manera dilatada, buscando obtener beneficios mediante intereses.
En otro orden de ideas, la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, presentó un informe sobre las iniciativas aprobadas en relación con las reformas a la Ley de Amparo y la creación del Fondo de Pensiones.
Además, anunció que el director del Instituto Mexicano del Seguro Social y funcionarios relacionados con las Afores brindarán una explicación detallada sobre la creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar.