Una sorprendente visita de la fauna local en la Universidad Autónoma de Nuevo León, dejó a estudiantes y personal en estado de asombro y precaución. En las instalaciones de la Facultad de Comunicación, un oso hizo una breve aparición mientras buscaba comida en su entorno. El episodio, aunque inusual, recordó la proximidad de la naturaleza en medio de la vida urbana.
El oso, atraído por el aroma de los platos con comida provenientes de la cafetería y otros potenciales festines, exploró el área en busca de alimento. En su búsqueda, examinó minuciosamente los botes de basura y los espacios donde esperaba encontrar sustento. A pesar de que esta incursión no es infrecuente en las instalaciones de la UANL, este avistamiento en particular tomó lugar en la Facultad de Comunicación, ubicada en Paseo del Acueducto.
La comunidad estudiantil activó el protocolo de seguridad en respuesta al avistamiento del oso, permitiéndole la libertad de abandonar la zona por sí mismo.
Por lo que después se retiró de manera apacible, aunque no se supo su destino final.
Los letreros de advertencia que se encuentran en toda la Unidad Mederos de la UANL son un recordatorio constante de la posibilidad de encontrarse con estos animales en el entorno universitario. La cercanía de los espacios urbanos a los hábitats naturales a menudo conduce a encuentros inusuales como este. La precaución y el respeto hacia la vida silvestre son cruciales para garantizar la seguridad tanto de los seres humanos como de los animales.
Este avistamiento es un recordatorio de que compartimos nuestro entorno con una diversidad de seres vivos, y nos insta a mantener la atención y el respeto hacia la vida salvaje que también habita en nuestras áreas urbanas.
