Con la llegada de la Semana Santa, el Gobierno de Coahuila lanzó un llamado a la ciudadanía para proteger los espacios naturales del estado, especialmente en zonas como la Sierra de Arteaga, uno de los destinos más visitados por turistas. Autoridades estatales han reforzado operativos de vigilancia y prevención de incendios forestales, promoviendo medidas como evitar fogatas, no dejar basura y reportar cualquier incidente al 911.
Aunque estas recomendaciones son pertinentes, la crítica ciudadana no se ha hecho esperar. Diversas voces apuntan que la protección ambiental no debe ser estacional ni limitarse a campañas informativas, sino formar parte de una política integral y permanente. La falta de infraestructura, señalización adecuada y vigilancia constante en muchas áreas naturales sigue siendo un reto que evidencia la necesidad de mayor inversión y compromiso gubernamental en el cuidado del medio ambiente.
La conciencia social es fundamental, sí, pero no puede sustituir el deber institucional. La responsabilidad de preservar el patrimonio natural debe ser compartida, pero liderada con acciones tangibles y no solo con llamados simbólicos.