La Regla Propuesta Busca Mejorar la Resolubilidad y la Estabilidad Financiera. (E.U.A.)
La Junta de Gobernadores del Sistema de la Reserva Federal, la Corporación Federal de Seguros de Depósitos y la Oficina del Contralor de la Moneda anunciaron de manera conjunta la extensión del período de comentarios hasta el 16 de enero de 2024 para su regla propuesta sobre deuda a largo plazo. La regla tiene como objetivo mejorar la resolubilidad de los bancos grandes y fortalecer la estabilidad financiera. Esta extensión proporciona a las partes interesadas más tiempo para analizar la propuesta y preparar comentarios exhaustivos.
Las agencias buscan la opinión pública sobre la regla propuesta, que exigiría que los bancos grandes con activos totales superiores a los $100 mil millones de dólares mantengan un nivel de deuda a largo plazo. Esta medida tiene como objetivo mejorar la estabilidad financiera al aumentar la resolubilidad y la resistencia de dichas instituciones.
Tras una notificación anticipada de reglamentación propuesta emitida en octubre de 2022, que exploraba varios cambios posibles, incluida una exigencia de deuda a largo plazo, la propuesta responde a los recientes fallos de bancos significativos. Estos fallos subrayan la importancia de contar con recursos adicionales absorbentes de pérdidas que los reguladores puedan utilizar para resolver bancos de manera ordenada, minimizando costos y riesgos de interrupción para el sistema bancario.
Al estipular que cada banco grande debe mantener una cantidad mínima de deuda a largo plazo para absorber pérdidas, la propuesta amplía las herramientas disponibles para resolver estos bancos en caso de fallo. Además, al mitigar el riesgo de pérdidas para los depositantes no asegurados, la deuda a largo plazo puede reducir la velocidad y la gravedad de las retiradas bancarias, disminuyendo el riesgo de contagio durante períodos de estrés.
La propuesta aborda específicamente los riesgos asociados con los grandes bancos que no son globalmente sistémicos (GSIB, por sus siglas en inglés) y no modifica sustancialmente los requisitos existentes para los GSIB. Además, la propuesta incluye disposiciones para evitar que los bancos grandes participen en ciertas actividades que podrían complicar su resolución. También desincentiva a estos bancos a mantener deuda a largo plazo emitida por otros bancos para minimizar la interconexión y el contagio en el sistema bancario.
La regla propuesta establece un período de implementación de tres años y permite que cierta deuda a largo plazo existente contribuya a los requisitos mínimos, otorgando a los bancos un período de transición razonable para cumplir con los criterios establecidos para instrumentos de deuda a largo plazo elegibles.