El gobierno de Nuevo León busca mayor control sobre la contaminación ambiental en la entidad. Así lo anunció el secretario de Medio Ambiente, Alfonso Martínez Muñoz, quien informó que insistirán ante el gobierno federal para que les otorguen facultades en el manejo de empresas que afectan al medio ambiente, como la refinería de Cadereyta.
Este martes, autoridades de la entidad acudirán a la Fiscalía General de la República para impulsar esta medida. Previamente, presentaron dos iniciativas, una ante el Congreso local y otra a nivel federal, con el objetivo de modificar una ley de 1988 que consideran obsoleta en materia ambiental.
El funcionario explicó que la dependencia a su cargo se inscribirá ante la FGR como coadyuvante, para así aportar pruebas sobre las afectaciones a la ciudadanía provocadas por la contaminación. Se espera que otras entidades se sumen en busca de descentralizar las facultades en materia ambiental.
El gobierno de Nuevo León ha expresado frustración ante la falta de respuesta del gobierno federal para atender el problema de contaminación de la refinería de Cadereyta.
El secretario de Medio Ambiente, Alfonso Martínez Muñoz, dijo que llevan dos meses intentando contactar sin éxito al director de la refinería, Martín Rodríguez Aboites, así como al secretario de Energía, Miguel Ángel Maciel Torres, y al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Explicó que han enviado solicitudes vía WhatsApp, Telegram, cartas y oficios, pero no han obtenido respuesta. Cuando intentaron clausurar la refinería en enero por incumplimiento de normas ambientales, fueron impedidos por militares que alegaron la independencia del ente federal.
«Llevamos intentando dialogar meses, pero se han hecho los sordos. Necesitamos que atiendan este problema que afecta la salud de los ciudadanos», manifestó el funcionario estatal.