Durante la audiencia general en el Aula Pablo VI, el Papa Francisco saludó a los presentes pero optó por no leer la catequesis, confiando la tarea a monseñor Filippo Ciampanelli, funcionario de la Secretaría de Estado. El Papa informó a la audiencia que, aunque su salud ha mejorado, todavía enfrenta dificultades y fatiga al hablar durante periodos prolongados.
El Sumo Pontífice ha experimentado problemas respiratorios debido a la inflamación de sus pulmones, lo que lo ha llevado a delegar la lectura de discursos extensos. A pesar de su mejoría, el Papa Francisco destacó que aún enfrenta desafíos y prefirió no exponerse a un esfuerzo excesivo.
La decisión de no leer la catequesis durante la audiencia general es coherente con la práctica reciente del Papa, quien ha priorizado su bienestar físico y ha delegado tareas para preservar su salud. La medida busca evitar que el Sumo Pontífice se fatigue y pueda recuperarse plenamente de los problemas respiratorios que ha enfrentado.
