El exsecretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna, fue sentenciado a 38 años y 3 meses de prisión por un tribunal federal en Nueva York.
El juez Brian Cogan le impuso esta pena, junto con una multa de 2 millones de dólares, tras ser declarado culpable de cinco cargos relacionados con narcotráfico y por mentir a las autoridades estadounidenses.
García Luna, quien fuera una figura clave durante el sexenio de Felipe Calderón, es el funcionario mexicano de más alto nivel en ser procesado en Estados Unidos por sus vínculos con el Cártel de Sinaloa. A pesar de la solicitud de la fiscalía para una cadena perpetua, el juez decidió no condenarlo de por vida, señalando: «No voy a sentenciarlo de por vida, voy a dejarle un poco de luz al final del túnel».
Durante la audiencia, Cogan acusó a García Luna de llevar una «doble vida», siendo un funcionario público ejemplar por un lado, y por otro, facilitador de actividades criminales. El exfuncionario, vestido con un traje azul marino, leyó una carta en la que reafirmó su inocencia, asegurando que nunca cometió los delitos que se le imputan.
La fiscalía, encabezada por Breon Peace, celebró la sentencia como un paso fundamental en la defensa de la justicia y el Estado de derecho. La defensa de García Luna ha anunciado que apelará el fallo en los próximos días.
Mientras tanto, frente a la corte, manifestantes mexicanos gritaban «Sigues tú, Calderón», en referencia al expresidente Felipe Calderón, quien integró a García Luna en su gabinete durante la guerra contra el narcotráfico.