El expresidente Donald Trump tiene previsto eliminar la política que restringe los arrestos de migrantes en “lugares sensibles” como escuelas, iglesias y juzgados.
De acuerdo con información de NBC News, esta medida será rescindida desde el primer día de su nuevo mandato, ampliando las facultades del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) para realizar detenciones en estos espacios.
La política en cuestión fue implementada durante el gobierno de Barack Obama para proteger a los migrantes en entornos considerados vulnerables. Sin embargo, Trump ya había intentado revocar esta restricción durante su primer mandato, autorizando arrestos en juzgados en 2018, lo que generó fuertes críticas de legisladores y defensores de los derechos de los inmigrantes.
Tom Homan, designado por Trump como “zar de la frontera”, confirmó que los operativos comenzarán en ciudades como Chicago. La decisión de permitir detenciones en juzgados se justifica, según ICE, porque estos lugares cuentan con inspecciones de seguridad y menores riesgos operativos debido a la prohibición de portar armas.
La postura de Trump responde a su promesa de campaña de intensificar las deportaciones masivas y superar las cifras de expulsiones de la actual administración de Joe Biden. Esta decisión ha reactivado las preocupaciones de diversas organizaciones de derechos humanos, quienes advierten que esta medida podría aumentar el miedo y la vulnerabilidad entre las comunidades migrantes en Estados Unidos.