México ha anunciado un aumento en los aranceles temporales a la importación de 544 fracciones arancelarias, con tasas que oscilan entre el 5% y el 50%.
Estos aranceles se aplicarán a una variedad de productos, incluyendo acero, aluminio, textiles, confección, calzado, madera, plástico, productos químicos, papel, cartón, productos cerámicos, vidrio, material eléctrico, material de transporte, instrumentos musicales y muebles, entre otros.
Esta medida se implementa en respuesta a la creciente adopción de nuevos modelos comerciales a nivel mundial, como el nearshoring, que busca acercar la producción de mercancías a los territorios de consumo. El objetivo es promover condiciones equitativas en el mercado y evitar distorsiones económicas que puedan afectar a los sectores productivos considerados estratégicos para el país.
Los aranceles temporales tendrán una vigencia de dos años y entrarán en vigor el día siguiente a su publicación, expirando el 23 de abril de 2026. Se asegura que este incremento está en consonancia con el derecho internacional y que las importaciones de mercancías originarias de países con los que México tiene tratados comerciales se regirán por dichos tratados preferenciales.
Para evitar afectaciones en las cadenas productivas y mantener la competitividad en sectores industriales sensibles como el eléctrico, electrónico, automotriz y de autopartes, se mantendrá el beneficio arancelario de los Programas de Promoción Sectorial aplicable a diversas fracciones arancelarias de productos siderúrgicos durante el mismo periodo de vigencia de los nuevos aranceles.